¿Bolsa de plástico en los pies para combatir el frío? ¡Contadme experiencias!
Hola, grupeta. Con este frío que ha comenzado a hacer, he leído en algunos foros de ciclismo que hay quienes utilizan bolsas de plástico en los pies como una solución rápida y efectiva para mantener los pies calientes durante las salidas en bici. ¿Alguien ha probado esta técnica? ¿Funciona de verdad o es solo una leyenda urbana? ¿Mejor que unos buenos calcetines o cubrezapatillas? Compartid vuestras experiencias y consejos, que estoy a punto de subir una gorda y no quiero acabar con los pies helados. ¡Gracias!
He probado las bolsas y, la verdad, sí que ayudan un montón. Puede parecer una chorrada, pero en rutas largas y frías se nota. Pero no los uses solos, ¡los calcetines son imprescindibles también!
Yo lo intenté una vez y fue un desastre. Las bolsas se me metieron en el zapato y casi caigo. Prefiero mil veces unos buenos membranos, aunque sean más caros.
Siempre llevo un par de bolsas en la mochilita, por si las moscas. No solo ahorran frío, sino que evitan que se mojen si hay charcos. Todo suma, eh.
¡Súper útil! A veces el viento es brutal y una bolsa puede hacer que aguantes unos km más sin pajara. Eso sí, no es la solución definitiva.
Eso de la bolsa es un invento de globos, yo tengo unos cubrezapatillas que son la bomba. No sé si ahorraré mucho, pero a mis pies les va genial.
He sido un escéptico, pero el otro día me lanzé y probé. La verdad es que me sorprendió. Moraleja: no subestimes el poder del plástico, sobre todo en invierno.
A mí no me va mal, pero tengo amigos que se quejan de que al final se les sudan los pies y terminan peor. Cada uno es un mundo, claro.
No sé hasta qué punto es eficaz, pero me gusta la idea de usar algo casero y práctico. Lo probaré este fin de semana, os cuento después.
Una vez que se mojan las bolsas ya no hacen nada, así que cuidado con las lluvias. Pero sí, son una buena opción para emergencias.
A mí no me convence en absoluto. Prefiero llevar mis zapatillas con buen aislamiento. Las bolsas son para la compra, ¡no para los pies!