¿El piñón de 9 dientes para MTB, una revolución o solo marketing?
¡Hola, jugones de la bici! Quiero abrir este debate sobre el famoso piñón de 9 dientes. Os confieso que tengo dudas. Por un lado, he oído maravillas de la fluidez en las subidas y cómo nos puede ayudar a mantener un ritmo constante en llano. Pero, ¿realmente merece la pena o es solo un capricho del marketing? ¿Alguien que lo haya probado puede dar su opinión? Y, por supuesto, ¿cómo se comporta en terrenos difíciles? ¡A ver si podemos sacar algo en claro, que la temporada de rutas ya está aquí!
Yo lo he probado y la verdad, creo que hay un antes y un después con el piñón de 9. En subidas, cuando estás al límite, te permite mantener la cadencia sin 'pajaras'. ¡Una gozada!
A mí no me convence. En mi grupo ninguno hemos dado el salto. Con un 11 ya vamos sobrados. ¿No os parece que es un un capricho más que algo necesario?
Lo que me preocupa es si podrá aguantar la presión. En rutas cargadas y con tanta piedra, ¿no creéis que se va a tostar más rápido que los de 11?
Tío, he cambiado mi MTB a un piñón de 9 y ha sido un acierto. La verdad, ahora subo menos ahogado y puedo chulear a los globos del grupo. Me estoy picando hasta en Strava. ¡Animaos!
Yo tengo un amigo que lo usa y dice que es una maravilla para el llano. Pero, en rutas montañosas, no lo veo claro. Prefiero quedarme con el 11 por si acaso.
He estado mirando alternativas y he visto que algunos ya están combinando piñón de 9 con platos más pequeños... ¿Alguien lo ha hecho? ¿Es un lío o realmente se nota la diferencia?
Después de muchos debates, me temo que al final voy a dar el salto. Siempre que se mantenga la durabilidad, es un paso hacia el futuro. ¡No hay que tener miedo a lo nuevo!
Estoy con los que dicen que es solo para 'pijos' que no saben apreciar un buen piñón. Con un 11 estás más que servido para cualquier trail en MTB. ¡Menos moda y más rodar!